Invierno

Estamos entrando en una de las mejores estaciones del año, aunque no empieza muy bien.
Marcaste el inicio del invierno, se empiezan a escuchar más a The Smiths, The Cure, Radiohead, The Beatles, The Kooks, etc, los cafés se llenan y las personas se vacían.
Los recuerdos atacan, las parejas terminan, todos se van, las personas se abrigan más, algunas engordan, los corredores dejan de correr.
Yo, estaré sentado en el Starbucks en el cruce de Javier Prado con Aliaga, tomando un Cappuccino Venti sin azúcar con una galleta, ya que, caliente pasa bien el delicioso amargo de la bebida.
Me compraré y habituaré de ir, para recordarte, para que Invierno me haga pensarte incluso si te tengo al lado, porque, tienes una amiga que me ayudará a no alejarme y a no rendirme, y porque no quiero hacerlo pero a veces soy cobarde.
Te esperaré con otro Cappuccino Venti, con azúcar y un chocolate sublime, quizás no en el mismo Starbucks, quizás en la puerta de tu universidad, afuera de tu casa o donde sea, quizás no.
Bienvenido Invierno, donde las parejas terminan, donde todos se van y se preocupan por si mismos.
Bienvenido Invierno, donde en vez de alejarme y hacer tourismo emocional entre cuerpos desnudos para mantener el calor hasta el verano, he decidido establecerme en un alma que tiene frío y viene muy arropada, para poder guarecerme de tus ventiscas, Bienvenido y gracias Invierno, porque a tu llegada éste año me has hecho ver que debo permanecer donde ya estoy.